El estudiar curso de idiomas en el extranjero puede ser un plan de pareja para disfrutar los momentos más románticos al tiempo que aprenden un nuevo idioma. Optar por esta idea no solo OS brindará las mejores experiencias y recuerdos para la relación sino que también será una excelente oportunidad para descubrirse y apoyarse.
Aunque si viajas solo también es un extraordinario plan porque podrás disfrutar de tu curso mientras conoces amigos y aprovechas los eventos que ofrece la ciudad.
Para empezar, estudiar un idioma en el extranjero tiene por añadidura la inmersión en situaciones comunicativas reales donde la comprensión se da a niveles más abstractos, tal como la entonación o las intenciones, de esta manera la habilidad lingüística se amplía al reconocer el sentido literal y/o figurativo.
Este beneficio solo lo encuentras al estudiar directamente en una ciudad con el idioma nativo. Y estar acompañado es la oportunidad para conocer y divertirse con el aura del amor.
Aquí te presentamos las ciudades más románticas de Europa y te contamos qué puedes encontrar en cada una de ellas.
1. Niza: Francés
Por supuesto, en nuestra lista se encuentra el idioma más romántico del mundo que dio vida a artistas como Edith Piaf, o cuyas ciudades fueron escenario de películas como El último tango en parís, y que además tiene entre sus filas a grandes poetas como Baudelaire. ¡Es que el romanticismo está en sus venas y en sus letras!
La ciudad perfecta para aprender francés y disfrutar de tu pareja es Niza, ubicada al sur de Francia con vista al magnífico Mar Mediterráneo y elegantes o joviales espacios. Inicia caminando en la playa hacia el Paseo de los Ingleses, si no quieres caminar puedes hacerlo en patines o bicicleta, incluso por medio marítimo, y gozar de la tranquilidad del agua.
Al llegar está la cima del Castillo con vistas panorámicas de la ciudad, y para finalizar puedes descubrir las posibilidades gastronómicas de la cocina nizarda donde resaltan las verduras y el salmonete, una combinación de olores y sabores tradicionales acompañada de un exquisito vino, porque nada es más romántico que una cena.
2. Florencia: Italiano
El valor literario, artístico y arquitectónico de esta ciudad es invaluable, seguro conoces a Leonardo Da Vinci, Miguel Ángel o Dante Alighieri, incluso habrás oído nombrar a Los Médici pero ¿qué tienen en común? ¡Florencia! cuna de la inspiración y el romance.
Julia Roberts en la película Comer, Rezar y Amar elige como su primer destino Italia para comer; en el camino encuentra amigos y reconoce el valor de compartir durante los alimentos, pero no solo eso, sino que también aprende los gestos que acompañan el italiano.
Entonces, ¿amas la pasta y la arquitectura? En Florencia encontrarás todo ¡bellissimo! Su exquisita arquitectura gótica y renacentista empieza en la Plaza del Duomo compuesto por la Basílica de Santa María del Fiore donde se encuentra la cúpula de Filippo Brunelleschi y dentro el mural El Juicio Final pintado por Vasari y Zuccaro.
Después el Baptisterio de San Juan con la obra de Ghiberti, La Puerta del Paraíso; sus detalles sobre la representación del viejo testamento impresionaron al joven Miguel Ángel; y finalmente, se encuentra el Campanario de Giotto.
Pero una vez hayan terminado las clases y después de caminar y admirar una de las ciudades que cambiaron la historia del arte, tal vez sea hora de buscar un restaurante. Prepárate para elegir entrada, primer y segundo plato y postre.
Además de la pizza, Florencia tiene platos ricos en carnes, salsas y pastas, los típicos son Trippa alla fiorentina, Pappa al pomodoro o Pappardelle alla lepre y de dulce un gelato, pero el plato principal será la conversación con tu pareja.
3. Lisboa: Portugués
Esta ciudad ofrece una perspectiva histórica y artística diferente, más moderna y definitivamente con una gran variedad de actividades disponibles que no son convencionales pero sí muy divertidas para ti y tu acompañante.
Desde la comodidad de la ciudad se pueden practicar deportes como el golf, surf o bautismo de vela; visitar las playas o descubrir rincones del arte urbano que le dan vida a la ciudad, entre ellos resalta Vhils.
También está el avistamiento de aves y la observación de la naturaleza, y después de la clase imagina disfrutar de un café, las panaderías y los azulejos en compañía de la estatua del escritor Fernando Pessoa en el famoso Café A Brasileira, déjate inspirar en portugués.
La variada vida nocturna ofrece otra alternativa más íntima: el baile. Seguro encuentras una que se adapte al tipo de ambiente y música que desees. Todo el medio del Arco de Rua Augusta y el fascinante ascensor de Bica.
4. Hannover: Alemán
Esta ciudad ubicada al noroeste de Alemania es muy tranquila y ofrece el ambiente perfecto para concentrarte en aprender un nuevo idioma, practicar y hacer planes centrados en la degustación del licor.
La cervecería Lister Turm Biergarten ofrece hasta diez tipos de cerveza y cocina local. Además el Lüttje Lage es una bebida típica con una manera muy particular de tomarse: la bebida es servida en dos vasos, una con cerveza y la otra con licor de maíz que se toman al tiempo, ¿te lo imaginas? Esto crea experiencias únicas.
Por otro lado, la ciudad ofrece la Linea Roja, una ruta de los lugares históricos. Y de almuerzo, el Rouladen, un plato alemán hecho de venado, ternera o cerdo con vista a los fascinantes Jardines geométricos de Herrenhausen.
Anímate a disfrutar de caminatas, actividades deportivas, descubrir la gastronomía, ver el amanecer junto al mar y el arte en la mejor compañía mientras aprendes un idioma.
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